
3 cenas que no engordan
Si estás aquí es porque esta noche quieres cuidar tu línea. ¡Bien!
Tu forma física depende de tus actividades diarias, del tipo de trabajo que tienes y, sobre todo, de cómo comes. A decir verdad, eso depende más de ti que de mí. Pero en este primer artículo del blog, te propongo 3 ideas ricas y fáciles de preparar —y por las que no tienes que preocuparte demasiado sobre si pillar o no unos kilos de más. Quédate hasta el final que el menú incluye postre.
Revuelto de Gambas con Setas y Queso de Cabra:
- 1 huevo.
- 30g de queso de cabra.
- 50g de setas.
- 50g de gambas peladas pequeñas.
- 30g de maíz.
- 1 pizca de perejil.
- 1 pizca de pimienta negra.
- 1 cucharada sopera de aceite de oliva virgen extra.
- 1 pizca de sal.
Lava las setas y pártelas en trozos más pequeños. Escurre el maíz. Vierte una cucharada de aceite en la sartén y déjala calentar. Echa las gambitas y las setas en la sartén y sazónalas con un poco de perejil picado. Después, introduce el maíz, y reparte la pimienta y la sal por encima. Baja el fuego a la mitad y deja caer un huevo. Con un utensilio para batir —o un tenedor—, bate y mezcla el huevo con el resto de los alimentos. Por último, sírvelo, y aprovecha el calor que el par de rodajas del medallón de cabra se funda.
Quinoa con Salmón Ahumado y Brócoli:
- 60g de quinoa blanca.
- 200g de salmón ahumado.
- 30g de maíz.
- 200g de brócoli.
- 1 pizca de pimienta.
- 1 cucharada sopera de aceite de oliva virgen extra.
- 1 pizca de sal.
Lava la quinoa con un colador fino —así te deshaces de la saponina, la sustancia amarga que la recubre. Ponla a hervir en una olla, unos 15 minutos. Te recomiendo que en ese tiempo cocines el brócoli. Hiérvelo si lo prefieres con textura blanda. Aunque, como a mí más me gusta, es lavado, cortado a pedacitos y rehogado en una plancha o sartén caliente —con una cucharada de aceite de oliva y una pizca de sal y pimienta. Una vez listo, sirve ambos alimentos en el plato, y complétalo con el salmón ahumado y algo de maíz.
Espinacas con Pasas y Piñones:
- 250g de espinacas.
- 40g de pasas sultanas.
- Una cucharada sopera de piñones.
- 1 pizca de sal.
- 1 diente de ajo.
Lava las espinacas y hiérvelas en una olla hasta que alcancen el punto de textura que sea de tu agrado. Una vez cocidas, deshazte del agua con un colador y devuélvelas a la olla. En la misma olla —si lo prefieres en una sartén—, rehógalas un rato con el fuego al mínimo. Deposita el ajo picado en láminas, las pasas y los piñones. Añade algo de aceite y sal. Ready.
+Bonus. El Postre. Yogur Griego con Trocitos de Fruta:
- 250g de yogur griego natural.
- Fruta partida en trozos.
Solo tienes que depositar el yogur en un bol y añadir los pedacitos de fruta. Aquí si que va muy a gustos. Una opción es añadir frutas del bosque, tipo arándanos o frambuesas. Otra, por ejemplo, un plátano a rodajas. Como gustes. Lo importante es que tú lo disfrutes.
* Para 1 ración (1 adulto).